En el famosísimo bosque de Vattel´a pesca había una vez una pequeña familia compuesta de siete monos: papá, mamá y cinco monos, no más altos que un dedal. Esta pequeña familia habitaba en las ramas de un árbol gigantesco, en medio del bosque, y pagaba quince ciruelas al año, como alquiler, a un viejo gorila mandón que se había empeñado en ser el casero