A pesar de la notoriedad de autores como Delorme, Perrault, Ledoux, Blondel, Durand, Laugier o Quatremére de Quincy, la teoría arquitectónica en Francia en la época clásica sigue siendo un asunto escasamente tratado. Tras el estudio de los órdenes arquitectónicos y las proporciones, a menudo se olvida la importancia de la terminología estética y crítica de la arquitectura. En efecto, durante muchos siglos, nociones, principios o términos tales como simetría, regularidad, gusto, simplicidad, conveniencia, carácter, etc., han servido para expresar los juicios de los iniciados y especialistas, al tiempo que lo vinculaban al ideal de lo clásico. Pero éste no se resume en uno solo de los principios enunciados, sino que resulta de la interacción entre varios criterios. A partir de una presentación de los distintos tipos de obras -diccionarios, tratados sobre arquitecturas concretas, tratados sobre los órdenes arquitectónicos- y a través de una serie de referencias monográficas consagradas a los términos esenciales de la época clásica, el libro va siguiendo los sutiles desplazamientos semánticos que se producen a partir del siglo XVI.