Ambrose Bierce, el inclasificable escritor
y periodista norteamericano, se ganó con todo merecimiento el sobrenombre
de «Bitter Bierce» como premio a la sarcástica e intensa
exactitud con que manifestó su desprecio hacia la necedad humana.
Su inteligencia lo abarcó todo; descreyó de todo, y lo devolvió
todo convertido en una literatura algo más corrosiva que el vitriolo.
Un día, a finales de 1913, harto de sus contemporáneos, enfermo
y consumido por los azares de una vida marcada por el inconformismo y la
independencia, cruza la frontera de México y desaparece misteriosamente...
En El diccionario del Diablo, Ambrose
Bierce afila sus armas para ofrecernos una burla total y despiadada
del género humano, de sus beneméritas instituciones, de sus
presupuestos lógicos -avalados por el sólido beneficio de
tener el Reino de lo Real de su parte-, de sus ideas más conspicuas,
de sus nimias creencias. Bierce, maestro del humor negro, se convierte
en diabólico lexicógrafo a fin de provocar una rebelión
contra las ideas recibidas, contra las ideas de los que reinan, contra
las ideas que se establecen impunemente...