En poco más de cien años se desarrolla en Alemania un gigantesco esfuerzo intelectual: el intento de emular y aun superar a la Grecia clásica, y el de asimilar el cataclismo de la Revolución Francesa interiorizándolo a través de otra revolución previa: la revolución en el modo de pensar exigida por Kant en la Crítica de la razón pura. El presente volumen examina el alcance, el influjo y las modificaciones de esa aetas kantiana, prolongada en el Idealismo, que comenzó sometiendo la sacralidad de la religión y la majestad del poder principesco al soberano Tribunal de la Razón y acabó con la espectacular conversión schellingiana de la filosofía en religión filosófica tras la muerte de Hegel.