«Escribí este libro porque sentía que nadie hablaba de ello. Y contar la historia de mi padre era contar la historia de los portugueses. Porque él no era diferente.»
En Mozambique, a principios de los años setenta, una niña de padres portugueses empieza a descubrir el mundo de los adultos mientras es testigo de las injusticias que la rodean. Isabela Figueiredo relata en estas excepcionales memorias su paso de la infancia a la adolescencia en Lourenço Marques –la actual Maputo–, la compleja relación con su padre y su marcha a Portugal durante la convulsa etapa de descolonización. La autora revela sin tapujos la violencia y el racismo feroz y normalizado y, ya en Portugal, el peso que le supondría su condición de «retornada». Publicada en 2009, la honestidad y fuerza de esta obra, que desmontaba cualquier imagen edulcorada del pasado colonial portugués más reciente, provocó admiración y polémica y, con el tiempo, se ha convertido en uno de los libros más relevantes de la literatura portuguesa de este siglo. Con una escritura transparente, lírica e intensa, la hondura literaria del Cuaderno golpea al lector en estas páginas que trascienden su valor testimonial para constituir, por encima de todo, una hermosa reflexión sobre el amor filial, turbulento e indestructible.
«Un libro que me impresionó enormemente.» Elvira Lindo
«Un emocionante ajuste de cuentas familiar y nacional (…) Un maravilloso ejercicio de introspección, con una mirada intimista capaz de diseccionar la realidad con trazos de lirismo y dramatismo.» Antonio Sáez Delgado (Babelia – El País)
«Desconcierta a los lectores, nos hace dudar, y eso es una de las mejores cosas que se puede decir de un libro.» Ander Izagirre (Zenda)
«Es la historia de los emigrados y retornados como nunca se había contado. (…) En Portugal nadie quiere oír lo que la gente como ella (la autora) quiere contar. La insultan, la acosan, se burlan de ella. Los retornados de clase trabajadora –los que vuelven fracasados por completo, fracaso sobre fracaso– son apestados. Sus historias ni se escuchan ni se escriben.» Elena Sierra (El Correo)
«La obra no está centrada en el aspecto histórico, sino en la manera en que los avatares terminan impregnando, después de todo, la vida social, familiar, personal e íntima de las personas.» Diego Gándara (La Razón)
«Confieso que quedé impresionado hace años al leer "Caderno de memorias coloniais", que acaba de ver la luz traducido al español gracias a Libros del Asteroide. Entonces me pareció la novela portuguesa más audaz y potente que había caído en mis manos en lustros. Sigo pensando lo mismo.» Luis M. Alonso (La Nueva España)
«Figueiredo ha roto un tabú, uno que ella misma llama ‘intriga colonial', por el cual no debía hablarse de lo que también hicieron los que aseguraban que solo fueron a Mozambique a trabajar. Y eso, claro, siempre molesta.» Álvaro Colomer (Cultura|s – La Vanguardia)
«Ningún libro restituyó mejor la verdad desnuda y brutal del colonialismo portugués en Mozambique. (…) Para ello era necesaria la búsqueda de las sensaciones infinitamente vibrantes y puras de una niña, hija de colonos, que vivía a flor de piel todo cuanto sucedía.» José Gil
«Figueiredo tardó años en escribir lo que la atormentaba; en asumir esta catarsis. Y solo pudo hacerlo tras la muerte de su padre. Este libro es un puñetazo en el estómago.» João Morales (Publico)
«Figueiredo abre una caja de Pandora y luego tiene el coraje de no cerrarla.» José Mário Silva (Expresso)