Esto no ha acabado, porque el amor no se acaba. El amor fluye y sobre todo se transforma. El invierno es la corriente que me ha llevado hasta aquí, no quiero otro sin mí y cada año que pasa se hace más largo dentro de este cuerpo para aprender a quererme.
El amor que me rodea ha evolucionado para conseguir que deje de huir de monstruos que se quedaron atrás o eligieron otro camino, de nuevos monstruos que han aparecido en el mío y otros que siguen recordándome que lo pequeño es lo esencial de la vida.
Ahora he escogido el camino que se abraza a mi cuerpo.
Cualquier día me enamoro y se acaba la historia.
Redry