• 50 SITUACIONES EMBARAZOSAS Y CÓMO SALIR DE ELLAS

    GALÁN, ANA EVEREST DE EDICIONES Y DISTRIB Ref. 9788444120980 Altres productes de la mateixa col·lecció Altres productes del mateix autor
    Es un hecho comprobado científicamente: el ser humano se tira pedos, eructos, hace caca, de vez en cuando se tropieza aparatosamente y tiende a meter la pata con cierta frecuencia. Es inevitable. Todos, en algún momento de la vida, hemos vivido y viviremos situaciones absolutamente bochornosas. Es p...
    Ancho: 160 cm Largo: 156 cm Peso: 250 gr
    No disponible
    9,95 €
  • Descripció

    • ISBN : 978-84-441-2098-0
    • Encuadernació : Rústica
    • Data d'edició : 01/01/2011
    • Any d'edició : 2011
    • Idioma : Español, Castellano
    • Autors : GALÁN, ANA
    • Ilustradores : NAVA MARCHENA CARLOS
    • Número de pàgines : 168
    • Col·lecció : SIN RODEOS
    Es un hecho comprobado científicamente: el ser humano se tira pedos, eructos, hace caca, de vez en cuando se tropieza aparatosamente y tiende a meter la pata con cierta frecuencia. Es inevitable. Todos, en algún momento de la vida, hemos vivido y viviremos situaciones absolutamente bochornosas. Es probable que dentro de unos años te olvides de lo que hiciste un verano, del cumpleaños de tu hijo o hasta del nombre de tu marido, pero lo que nunca olvidarás son esos momentos embarazosos en los que te hubiera gustado que te tragara la tierra, pero evidentemente no lo hizo, porque si fuera así no estarías aquí leyendo este libro.
    Puesto que sabemos que tarde o temprano nos enfrentaremos a estos momentos tan desagradables, lo mejor que podemos hacer es estar preparados para salir de ellos con la cabeza muy alta o por lo menos, reírnos en el intento. Para convertir una situación embarazosa en un momento sin importancia es fundamental seguir las siguientes tres normas: Naturalidad / Rapidez / Sentido del humor.
    Cuando termines este libro, verás que puedes enfrentarte a cualquier situación, por bochornosa que sea, sin miedos, complejos ni cargos de conciencia. Bueno, a lo mejor algún cargo de conciencia si tienes, sobre todo cuando utilices el siempre práctico recurso de echarle la culpa a otro, pero bueno, piensa que tu imagen y reputación habrán quedado a salvo.