La obra presenta una documentada panorámica por las diversas tendencias que constituyeron el movimiento conocido genéricamente como el Expresionismo alemán, una forma de interpretar el arte que rompía con las concepciones del clasicismo pictórico predominante a final del siglo XIX y que abriría nuevos caminos para la pintura contemporánea. El volumen se inicia con el estudio de sus dos principales grupos: Die Brücke (El Puente), del que formaron parte artistas como Emil Nolde, Ernst Ludwig Kirchner, Otto Müller, Karl Schmidt-Rottluff, Hermann-Max o Erick Heckel, y Der Blaue Reiter (El Jinete Azul), del que formaron parte Vasili Kandinski, Paul Klee, Franz Marc o August Macke, grupos ambos que estuvieron activos entre los primeros años del siglo XX y el inicio de la primera guerra mundial. Paralelamente al expresionismo alemán, se tratan los pintores encuadrados en este movimiento en las escuelas de Austria y Suiza, con artistas tan importantes como Gustav Klimt, Egon Schiele u Oskar Kokoschka.