Estudio sobre escritura y oralidad en los siglos xvi-xviii que ofrece no sólo los fundamentos humanísticos de la escritura, sino su traslado a las obras literarias: un viaje de ida y vuelta en el que la oralidad se hace memoria y vida latente en las grafías que la rescatan del olvido y, al tiempo, paradigma de todo un mundo escrito en el que las letras parlantes se ofrecen como inmensa partitura siempre abierta a lecturas y reescrituras continuas.