Bernd Kormann, en el título de un trabajo publicado en 1991, habla de la tríada tiempo-espacio-modo de acción. Efectivamente, en la mayor parte de los trabajos dedicados al estudio de la expresión de las relaciones temporales en las lenguas naturales se habla de estos tres conceptos. Depende del interés del investigador el centrarse en uno de ellos más que en los otros, pero parece que las estrechas relaciones que mantienen entre sí son indiscutibles. En este triángulo conceptual podemos distinguir una pareja natural: formada por el aspecto y por el modo de acción. De hecho algunos autores hablan de aspectualidad para abarcar la compleja fenomenología que se escode detrás de estas dos denominaciones. Frente a ellas, el tiempo gramatical, aún reconociendo la estrecha relación que tiene con los otros dos conceptos, mantiene una relativa independencia.