Un libro todavía no superado sobre los orígenes de la vanguardia, tan agudo de análisis como rico en anécdotas reveladoras. La obra y las vidas de Satie, Jarry, Apollinaire y el aduanero Rousseau, entre la parodia y el heroísmo, la ingenuidad y el desencanto, deben ser examinadas de nuevo por quienes juzguen a un siglo XX que tal vez, diciéndose su heredero, haya acabado traicionándolos.