«Se quedó dormido en menos de un minuto. Yo temblaba. Atrapado por su brazo, mi pierna rozando levemente su pierna desnuda, mi mano ardía allí quieta, posada sobre su chándal, a la altura del ombligo, inmovilizada por el miedo, a diez centímetros de su bañador azul. En algún momento supe que no sería capaz de resistir más, que aquel tormento era demasiado atroz y que acabaría acariciándolo.» Con un lenguaje directo y provocador, el autor consigue sumergirnos en la obsesión que embarga al protagonista de la novela. Un joven universitario embriagado por el deseo hacia el hermano pequeño de su amiga.
Todo en el muchacho resulta perfecto: el rostro, la sonrisa, incluso el bañador azul que lleva en la piscina. Entre ambos se inicia una compleja relación, vivida por cada uno de ellos de forma radicalmente opuesta. Es una novela que te leerás de un tirón y quedarás atrapado por la compleja relación de los dos protagonistas.
Su historia de amor refleja la forma a veces tan opuesta en que dos hombres afrontan su homosexualidad: unos la aceptan y la disfrutan desde el primer momento y otros la rechazan y la reprimen.
