August Seebeck es un hombre bastante normal que se halla en la veintena. Su tía abuela Tansy ha estado encontrando cadáveres cada sábado por la noche en su bañera, que han desaparecido por la mañana. Al menos es lo que ella dice. August decide ignorar el hecho hasta que descubre que es cierto y ve a alguien salir del espejo... Descubre súbitamente que es un Jugador en el Concurso de Mundos del multiverso, al igual que su familia. Su viaje hacia la comprensión sigue un clásico patrón de búsqueda del tipo Parsifal, salvo porque August no es precisamente un tonto.