Partiendo de las concepciones histórico-jurídicas de la escuela hegeliana de Savigny, el autor analiza de manera rigurosa la idea de la existencia de un remoto periodo de la humanidad en el que los valores morales, jurídicos y políticos habrían estado estructurados en torno a la ginecocracia, es decir, el poder de las mujeres. Un clásico de la antropología y de la historia.