Más que un libro de viajes, el presente texto es un libro sobre los viajes, sobre cómo y por qué puede llegar alguien a hacerse etnólogo, y sobre el modo en que se integran las aventuras del explorador y las investigaciones del científico hasta llegar a formar la experiencia propia del etnólogo. El autor -etnólogo, sí, pero también filósofo y moralista- trata de analizar estas cuestiones cotejando sus recuerdos, a veces lejanos, y proponiedo un recorrido entre Asia y América, que no renuncie a los pintorescos detalles que ofrecen -por ejemplo- las sociedades indígenas del Brasil, pero que a la vez los sitúe en una perspectiva más amplia: en el marco de una autobiografía intelectual que examine las relaciones entre el viejo y el nuevo mundo, que defina el lugar del hombre en la naturaleza y que clarifique el significado de la civilización y del progreso.