Oporto se alza espectacular a orillas del Duero y cautiva con su casco histórico, fastuosa gastronomía y vino, animada vida nocturna y encantadores habitantes. Uno queda prendado de esta ciudad tan sentimental al recorrer su dédalo de callejas medievales, descubrir los matices del oporto en las lonjas de la ladera y tomar un tranvía al mar en Foz.