Chicago, 1893. Una feria internacional, un asesino en serie? La historia real que ha entusiasmado a millones de lectores en todo el mundo.
Los dos eran inteligentes y tozudos, y el afán de triunfar los empujó cada vez más lejos: el arquitecto Daniel Hudson Burnham recibió el encargo de diseñar y construir los pabellones de la Exposición Universal de Chicago, que abriría sus puertas en mayo de 1893; Henry H. Holmes era médico y decidió aplicar sus conocimientos durante el evento expositivo de la manera más cruel. Mientras Burnham levantaba las paredes de unos palacios espectaculares, Holmes mandó construir, en los sótanos de su casa, unas salas de tortura en las que encontrarían la muerte un sinfín de mujeres.
Lo que parece la trama de una novela de horror fue a finales del siglo xix una realidad que conmovió a un país entero y que tuvo como testigos de excepción a hombres tan dispares como Buffalo Bill, Theodore Dreiser y Thomas Edison. Las tribulaciones del arquitecto y el médico, ejemplos del orgullo y la más insondable maldad, llegan hasta nosotros gracias a este extraordinario libro, la historia de una locura.