A pesar de la cantidad de debates y estudios que existen sobre la flexibilidad, todavía se desconoce cómo reaccionan los actores de la relación laboral ante las transformaciones que la flexibilidad genera. Desde una perspectiva sociológica, esta investigación polemiza con las escuelas institucionalista y regulacionista y traslada el punto de mira al nivel de los puestos de trabajo. El investigador detecta que la flexibilidad genera una serie de incertidumbres que se convierten en catalizadoras de acciones que persiguen controlar el entorno laboral y organizativo. El texto analiza los discursos unitaristas de la dirección empresarial, la disciplina de la contratación, las diferentes formas de negociación del esfuerzo y los intercambios sociales que se desarrollan entre los/las trabajadores y la dirección empresarial. La investigación en que se basa este texto descansa en dos áreas: la sociología de las organizaciones y la sociología del trabajo. A través de un enfoque etnográfico el autor conecta el análisis de la realidad observada con las discusiones teóricas más relevantes en estas dos áreas de conocimiento.