Ojalá pudiéramos ser capaces de hablar de la muerte, prepararnos y también preparar a los niños para cuando esta llegue. Aunque no lo creamos, ¡no los íbamos a traumatizar!, al contrario, les daríamos herramientas para hacer frente a una experiencia que sí o sí van a tener que afrontar.
Este cuento, y la guía que lo sigue, es un material para que niños, adolescentes y adultos puedan hablar y reflexionar sobre la muerte y encontrar pautas para acompañar en el proceso de duelo.