A Barry, que está a punto de cumplir los diez años, no le gustan sus padres: no le dejan jugar a videojuegos, son aburridos, no tienen dinero, ¡y le pusieron un nombre tan insípido como Barry! Un día desea cambiarlos con tanta, tanta fuerza… que aparece en un mundo paralelo en el que los niños pueden elegir a sus padres. En su búsqueda, Barry vivirá las experiencias más disparatadas con familias que aparentemente son sensacionales pero que, vistas de cerca, son bastante más absurdas de lo que en principio parecían…