• FUEGO

    HILL, JOE NOCTURNA Ref. 9788416858101 Altres productes de la mateixa col·lecció Altres productes del mateix autor
    «Si aún no tienes Fuego, lo necesitas. Un libro original y fascinante que no podrás parar de leer». GEORGE R. R. MARTIN Nadie sabe dónde y cuándo se originó, pero una plaga se ha extendido por todas partes. Los médicos la llaman «Trichophyton draco incendia»; los demás, escama de dragón, una espora ...
    Dimensions: 230 x 160 x 60 cm Peso: 1600 gr
    No disponible
    24,00 €
  • Descripció

    • ISBN : 978-84-16858-10-1
    • Encuadernació : Cartoné
    • Data d'edició : 01/05/2017
    • Any d'edició : 2017
    • Idioma : Español, Castellano
    • Autors : HILL, JOE
    • Traductors : RAMÍREZ TELLO, PILAR
    • Número de pàgines : 816
    • Col·lecció : NOCHES NEGRAS
    • NumeroColeccion : 1
    «Si aún no tienes Fuego, lo necesitas. Un libro original y fascinante que no podrás parar de leer». GEORGE R. R. MARTIN
    Nadie sabe dónde y cuándo se originó, pero una plaga se ha extendido por todas partes. Los médicos la llaman «Trichophyton draco incendia»; los demás, escama de dragón, una espora que marca la piel de los contagiados con manchas negras y doradas antes de hacerles estallar en llamas. Y no hay antídoto.
    Harper Grayson está embarazada y, por su trabajo de enfermera, ha visto a centenares de pacientes arder... o los veía antes de que el hospital se incendiara. Ahora sólo puede fijarse en las marcas que han empezado a recorrerle la piel. Tras el primer brote, ella y su marido acordaron resolver la situación por sus propios medios en caso de que se infectaran. Pero Harper quiere vivir; al menos, lo suficiente para dar a luz.
    Mientras la población en la que residen se ve envuelta en el caos por la enfermedad y los grupos que pretenden exterminar a los contagiados, Harper coincide con un misterioso desconocido que deambula entre los escombros con indumentaria de bombero y las marcas de la espora. Sin embargo, no arde. Es como si hubiera aprendido a usar el fuego a modo de escudo para las víctimas... y de arma contra los verdugos.