Katzenbach vuelve a demostrar en esta nueva novela, ser un maestro del suspense psicológico. Ashley Freeman, estudiante de historia del arte en Boston, tiene una relación de una noche con un desconocido llamado Michael O'Connell. Al principio, parece un admirador insistente, pero poco a poco O'Connell, un ingenioso hacker, va entrando en la vida no sólo de Ashley, sino también del padre de ésta, un serio profesor universitario, y de su madre, una prestigiosa abogada, revelándose como un psicópata obsesionado por controlar la vida de la chica. Todo se convierte en una pesadilla. No hay posibilidad de disuadirlo: ni los sobornos ni las amenazas lo detienen. Y cuando el investigador asignado al caso aparece muerto, la familia entera entiende que se enfrenta a algo mucho más serio de lo que han imaginado.