Vivir al final de la calle 118 no es fácil.
La madre de Valeria y Raven las abandonó hace años sin dar explicaciones
y ambas han tenido que aprender a ganarse la vida. Mientras
Valeria tiene un insignificante trabajo como modelo, su hermana patea
la ciudad en busca de hombres a los que seducir para pagar el
alquiler a cambio de sus servicios. Valeria pensaba que todo seguiría
así para siempre? hasta que escucha la música de aquel chico al final
de la calle, junto a su casa, y sus miradas se cruzan.
Desde ese momento, una serie de curiosas coincidencias llevará a los
personajes de esta novela a cambiar sus vidas como nunca se hubieran
imaginado.