«Yo lo único que sé seguro es que el mundo está lleno de fronteras y que tengo la manía de querer cruzarlas para ver qué hay al otro lado». Miquel Silvestre
Tras la publicación de Un millón de piedras, Miquel Silvestre se embarca ahora en una nueva aventura, desde Europa hasta Asia Central para llegar luego a Tierra Santa, a modo de peregrinaje iniciático a lomos de una moto. Viajar en moto no es siempre rodar y rodar, moverse libre, born to be wild. A veces, la moto se convierte en una bola de presidiario que consume toda la energía, que se estropea, se accidenta... y hay que saltar un océano o cruzar una frontera. Miquel Silvestre no se considera un héroe pero viaja para parecerse a uno de verdad, para vivir una épica real a pesar de los miedos y las limitaciones. La emoción del nómada queda recogida en este diario de viaje lleno de peripecias, de modo directo y sin adornos. La realidad ya es suficientemente surrealista como para inventar nada.