Jóvenes, brillantes y glamurosos, todo les sonríe después de su éxito como arqueólogos al desenterrar una extraordinaria escultura fenicia de la diosa Astarté, señora de la noche, de la sensualidad y de la venganza.
Hasta que Lilith irrumpe en sus vidas, arrastrando a Roberto a un torbellino de pasión clandestina y desenfrenada.