Las bodegas españolas muestran una extraordinaria variedad de estilos arquitectónicos, siendo algunas de ellas monumentales edificios vanguardistas diseñados por arquitectos de reconocido prestigio internacional. Esta obra aúna esos dos mundos tan distintos y tan cercanos: el del vino y el de la arquitectura; dos obras de arte que, juntas, se han convertido en verdaderos museos del vino dignos de ser visitados.