¿Quién soy? ¿Cómo es mi cuerpo? ¿Qué hay en mi cabeza? ¿Por qué algunos días me siento tan mal dentro de mi propia piel? Éste es el tipo de preguntas que todo el mundo acaba planteándose un día u otro sobre todo cuando el cuerpo en cuestión empieza a protestar y nos sugiere que también a él, como a nosotros, le gustaría ser de otra manera. Entonces, el dolor comienza a manifestarse y corremos al médico, nosotros o al terapeuta, en busca de una reparación más o menos puntual. Sin embargo, una vez experimentados los primeros síntomas de la mejoría, volvemos a las andadas, a convivir de nuevo armoniosamente con nuestras enfermedades físicas y mentales. Éstas son las preguntas que se plantea Thérèse Bertherat en este libro, pues, en el fondo, es como si nos negáramos a ser adultos, lo cual nos impide nuestro cuerpo y nuestra mente en su totalidad. Pero llegará un día en que esos pequeños dolores, esas pequeñas neurosis, dejarán de parecernos útiles, y en ese momento deberemos asumir toda la responsabilidad, admitir nuestro poder para con todo el cariño y el amor que realmente merecemos.