Cualquier persona sensible que reflexione sobre la Europa del siglo XX, se verá inmediatamente perturbada por una pregunta inquietante: ¿por qué en el siglo pasado los europeos fuimos capaces de conseguir las mayores metas científicas y artísticas, y, al mismo tiempo, desencadenar la más execrable barbarie sobre nuestros semejantes?
En este libro que recorre todo el "corto" siglo XX, desde la primera guerra mundial hasta el hundimiento del fallido imperio soviético, al gran historiador Gabriel Jackson le interesa menos la historia económica, diplomática y militar
-que, sin embargo, repasa magistralmente en sabios trazos-que el impacto de las ideologías, las artes y las ciencias en el acervo universal. En una infrecuente combinación de honestidad intelectual y reflexión crítica sobre el significado ético y social de los acontecimientos que describe, Jackson, que trata de obtener una respuesta a aquella inquietante pregunta, se revela en estas páginas más como humanista que científico social, más preocupado por la vida de los seres humanos que por las estadísticas de producción material.