Todo comenzó cuando Charlotte Chandler fue enviada un día por la revista Playboy para entrevistar a Groucho Marx. Se cayeron tan bien que, desde entonces, durante seis años, hasta la muerte del genial humorista en 1977, a los 86 años, compartió con él casi diariamente sus tertulias de amigos, sus preciosos recuerdos lejanos y sus sarcásticas divagaciones sobre el pasado más reciente, así como el relato de las extravagantes vivencias y las más o menos gratas aventuras amorosas que ha protagonizado. Hasta tal punto fue estrecha la convivencia de Charlotte y Groucho que éste acostumbraba a decirle : «Me conoces más que yo». Quienes no creyeron una sola palabra de lo que Groucho contó sobre sí mismo en Grouchoy yo (Andanzas 168 y Fábula 30) podrán cerciorarse hoy, con esta biografía, de lo que era falso o verdadero, sin por ello dejar de pasarlo casi tan en grande como el propio Groucho viviéndola y la autora escribiéndola.