Con el nacimiento y evolución del cristianismo en la Europa mediaval se instaura un nuevo género literario que se nutre de un renovado compendio de figuras ejemplares y hazañas singulares, en realidad una sustitución de argumentos mitológicos: las hagiografías. Tal es el caso de esta historia de una bellísima mujer pública y de su camino de santidad mediante el arrepentimiento.