Estamos ante una obra valiente que invita a reflexionar sobre los fundamentos de la moral y a revisar nuestras opiniones sobre tan controvertidos temas como la homosexualidad, las técnicas de reproducción asistida, el aborto o el uso de drogas. La moral, dice Holloway, es más un arte que una ciencia, y nos exige flexibilidad, capacidad de improvisar y responder a situaciones reales.
Richard Holloway nació en Escocia. Se ordenó sacerdote en 1959 y pasó temporadas en África y Nueva York, donde conoció a su esposa con la que tiene tres hijos. Durante catorce años fue obispo de Edimburgo y cabeza de la Iglesia Episcopaliana de Escocia. Es conocido en Gran Bretaña por sus posturas abiertas y progresistas y su decidido apoyo a medidas como la ordenación sacerdotal de mujeres.