El reflejo de una Cuba decadente acompaña a este conocido investigador ruso en un caso que le hará encontrarse a sí mismo, al amor y darse la oportunidad de volver a disfrutar. Cuando el cuerpo de un ruso es arrastrado a las turbias aguas de la bahía de La Habana, Arkady Renko debe viajar a Cuba para identificar el cadáver. Durante la búsqueda del asesino, Renko descubre una ciudad de soledad descolorida, peligro inesperado y contradicciones desconcertantes. Su investigación le llevará a descubrir a una bella policía cubana, así como los rituales de la santería, a un americano fugitivo y a un grupo de mercenarios despiadados. En un lugar donde desdeñan cuanto huela a ruso, Hemingway se dedicó a la pesca, prosperó el KGB y la música está siempre en el aire, Renko encuentra el rastro de un engaño de envergadura mundial, y la razón para disfrutar otra vez de su propia vida.