En el entorno actual de cambios rápidos, la cuestión de cómo enseñan realmente los docentes de primaria es más importante que nunca. Todos los profesores con experiencia saben que ningún educador puede hacer que un alumno aprenda. La enseñanza y el aprendizaje sólo pueden tener lugar con la colaboración tanto del profesor como del alumno. Es, por lo tanto, un proceso negociado, pero ¿qué es lo que negocian realmente ambos?
La observación de las clases hace pensar que los profesores y los alumnos negocian una relación de poder, que no tiene nada que ver con instituciones, o con el poder y la autoridad del profesor. Este poder es simplemente el que se genera entre dos o más personas cuando se comunican entre ellas. A pesar de esto, cuando observamos este proceso de negociación en el aula, pronto se hace evidente que es crucial para la enseñanza y el aprendizaje, porque determina cuánto se puede aprender, y cómo afecta la calidad del aprendizaje.
La autora estudia las estrategias de poder, desde las dominantes hasta las menos dominantes, utilizadas por profesores y alumnos para restringir o facilitar lo que puede ocurrir en clase. Examina el concepto de liderazgo en una situación de poder, y cree que ?lo que hace un profesor? está cada vez más afectado por un contexto de poder mucho más grande que el de la escuela o la comunidad.