A partir de una investigación etnográfica realizada en diversas escuelas públicas mexicanas, las autoras nos ofrecen tres senderos cuyo objetivo es hacer visible los valores que los docentes transmiten cotidianamente a través de sus prácticas a alumnos. Se trata de una invitación a mirar la enseñanza desde la perspectiva de los valores, sobre todo a partir del comportamiento normativo docente, el comportamiento afectivo y la conducción de los procesos de enseñanza.
A través de un recorrido exhaustivo y minucioso, lleno tanto de descubrimientos como de nuevos interrogantes que cada paso suscita, las autoras ayudarán al lector a identificar los valores implicados en las declaraciones de los educadores, en las normas de clase, en el trato otorgado a los alumnos o en la manera de presentar los contenidos curriculares.
Ya sea desde la docencia, la dirección escolar o la investigación, los profesionales de la educación encontrarán en este libro una sugerente guía para reflexionar sobre la propia práctica, así como un interesante y provocador diagnóstico sobre las oportunidades que la escuela está ofreciendo al desarrollo de la moralidad de sus alumnos.