El concepto anomia designa las manifestaciones que acompañan el difícil tránsito de un tipo de sociedad que se degrada a otra que le sucede con la misma continuidad y que no ha tomado todavía forma. A partir de este concepto, Jean Duvignaud muestra cómo las sociedades transformándose provocan numerosas reacciones imprevistas en los individuos. Aparecen comportamientos inéditos, las normas son contestadas, la marginalidad y la disidencia se enriquecen con nuevas fuerzas. Partiendo de este planteamiento el autor reflexiona sobre el lugar y el rol que deben tener las ciencias sociales en una sociedad que vive permanentemente sometida a fuertes perturbaciones.