Emily ha resuelto sus misterios y ahora disfruta de una nueva existencia, con su madre y sus gatos. Inquieta y traviesa como es, la niña no hace nada más que idear nuevas jugarretas con las que divertirse... hasta que estas dejan de tener gracia. ¿Conseguirá Emily deshacer el enredo que ha provocado en esta ocasión? Un entretenido libro que demuestra lo necesarias que son la paciencia y la amistad.