«A mí, Hasan, hijo de Mohamed el alamín, a mí, Juan León de Médicis,
circuncidado por la mano de un barbero y bautizado por la mano de un
papa, me llaman hoy el Africano, pero ni de África, ni de Europa, ni
de Arabia soy. Me llaman también el Granadino, el Fesí, el Zayyati,
pero no procedo de ningún país, de ninguna ciudad, de ninguna tribu...» Durante la época en que los grandes imperios cristianos y musulmanes
pugnaban por imponer su hegemonía en el Mediterráneo, un hombre
nacido en Granada poco antes de ser conquistada por los Reyes
Católicos vivirá una aventura extraordinaria. Una experiencia vital
en la que se entrecruzarán el islam y el cristianismo, Oriente y
Occidente. Tras dejar su tierra natal, se exilia en Fez como tantos
árabes andaluces, pero su inquietud y las vicisitudes le llevarán a
trasladarse a la misteriosa ciudad de Tombuctú, a conocer los quince
reinos negros que separan el Níger del Nilo, a visitar El Cairo, en
la que será testigo de la toma de la ciudad por los otomanos, y
Constantinopla, conquistada también por estos últimos, años antes de
la caída de Granada. En su viaje de vuelta es capturado por un pirata
siciliano que le abrirá a un mundo inesperado: en Italia entra en
contacto con el papa León X y con Julio de Médicis, lo que le
permitirá escribir su Descripción de África y colaborar en un
monumental diccionario políglota.
Amin Maalouf nos acerca en esta novela apasionante, con descripciones evocadoras y llenas de colorido, a la vida de León el Africano y a la convulsa época que le tocó vivir. A las aventuras y desventuras de un granadino excepcional, guiado por la pasión de vivir y el instinto de la felicidad, a quien el destino le llevó a superar las fronteras físicas y culturales.
«... Soy hijo del camino, caravana es mi patria y mi vida la más
inesperada travesía.»