El Caballero del León es, sin duda, una de las obras más perfectas de Chrétien de Troyes (ca. 1135-1190). Su autor, quizá el mejor y más representativo de los escritores de una época de auge y vitalidad creativa, nos adentra con un encanto extraordinario en la atmósfera mágica y fascinante de las aventuras de los caballeros del rey Arturo. Su argumento ;una historia de amor al gusto de la civilización cortés; reinterpreta, con gran habilidad narrativa, esquemas míticos provenientes de los relatos célticos difundidos oralmente y, a su vez, adaptados al ambiente y la moral caballeresca. Así, el caballero Yvain, símbolo de la caballería cristiana, ayudado por un león, realizará, a través de todas las pruebas iniciáticas que atraviesa, una íntima alianza con la Dama de la Fuente, que le llevará a la Fuente más sagrada y secreta, donde manan perennemente todos los poderes de la vida.