Hay Lin se enfrenta a una terrible verdad sobre sus padres. Desesperada, acude a su abuela y a la magia para obtener respuestas, pero descubre que nada puede hacer más que observar. Matt sigue vigilando a Liam de cerca y acaba cayendo prisionero en manos de Takeda. Todo parece indicar que los enemigos de las W.I.T.C.H. están ganando la partida, pero las guardianas no se dan por vencidas.