Ciudad amurallada que llegó a contar con 95 torres, debe su desarrollo a la rica vega que riega el río Segura. Conquistada por Alfonso X y reconquistada nuevamente por Jaime I, floreció en el siglo XVIII tras apoyar a los Borbones.
Hoy en día, esta ciudad barroca por excelencia se extiende devorando la huerta que le dio origen a cambio de modernidad y cosmopolitismo.
La capital del barroco, Murcia, tiene como protagonista a la catedral, ya que constituye un compendio de estilos, así como un conjunto artístico de enorme belleza.
El Mar Menor se ha consagrado como uno de los centros turísticos más importantes del sureste peninsular. Su oferta hotelera, deportiva y recreativa, sus buenas comunicaciones y su belleza atraen cada año a un elevado número de visitantes.
Además de la riqueza turística que encierra, el Mar Menor y las tierras que lo rodean poseen una importancia ecológica de primer orden. No en vano, sus salinas, en la zona norte, son una de las zonas húmedas más importantes de la península.