Una fría noche de octubre, cinco personas se reúnen en la costa de Jersey para preparar el allanamiento del Hotel Parangon. Construido durante los años gloriosos de Asbury Park por un millonario, el magnífico edificio está ahora apuntalado y listo para su demolición.
Las cinco personas son «allanadores», término que designa a los exploradores urbanos: arqueólogos de ciudad cuya pasión es investigar edificios abandonados y sus secretos. Esta noche los ha reunido un reportero que quiere escribir un artículo sobre ellos para The New York Times.
Cuando el grupo se adentra en el túnel que conduce al hotel, se da cuenta de que el edificio es mucho más de lo que pensaban: un lugar arrasado por el tiempo y habitado por el mal.
David Morrell describe con todo detalle la angustia y el terror en una novela de suspense sin tregua, cuyos fantasmas perseguirán a los lectores durante varias noches.