Aquel 4 de Julio, Wes Holloway, un asistente presidencial ambicioso y arrogante, metió al Ron Boyle, el mejor amigo del presidente, en la limusina presidencial. Cuando al viaje acabó, Wes había quedado permanentemente desfigurado y Boyle estaba muerto, víctimas de un asesino demente.
Ocho años más tarde, Boyle es descubierto, vivo y en perfecto estado de salud, en Malaisia. En ese momento, Wes tiene la oportunidad de deshacer el peor día de su vida. El intento de averiguar qué sucedió realmente lleva a Wes a enfrentarse a un rompecabezas presidencial que ya tiene diez años de antigüedad, a hechos misteriosos enterrados en la historia de la masonería y a un código de doscientos años inventado por Thomas Jefferson.