Mediante gráficos y pequeños textos de fácil comprensión, se recogen todas aquellas acciones que, repetidas con insistencia, ayudan a formar un buen portero. Se incluyen acciones como la colocación, los saltos, las salidas, las que se relacionan con el suelo o la utilización de manos y puños, sin olvidar el dominio de los pies, habilidad imprescindible para la práctica de un fútbol moderno.