«Si aquel día esa anciana no hubiera entrado en la farmacia de papá, nos habría evitado una gran emoción...» Así comienza la historia de Max y de su perro Bello, o el señor Bello para ser exactos. El elixir azul que la extraña anciana le entrega al padre de Max, es un potente fertilizante que hace crecer con rapidez a las plantas, pero las transforma. Cuando Bello bebe accidentalmente de él, y también otros animales, como las gallinas y el conejo del señor Millardo, éstos sufren unos efectos tan sorprendentes que la frontera entre lo humano y lo animal se disipa... Será una gran sorpresa descubrir que los animales también tienen su personalidad... pero aquí no os lo podemos contar: hay que leer el libro.