Este es un homenaje a David Gómez. Y por extensión, a todos los apasionados del medio ambiente que han sabido convertir nuestro entorno natural en arte.
El elenco de fotógrafos que reúne esta obra es el mejor recuerdo a David Gómez. Y es también el mayor alegato a favor de la vida. A la vida de los espacios y especies de nuestro territorio aragonés, que es tanto como decir de nosotros mismos.