Desde una perspectiva totalmente educativa, se analiza la influencia real que ejerce el deporte en la infancia y la adolescencia y las alternativas para que sea una verdadera herramienta formativa.
El deporte escolar ofrece a los niños y jóvenes la oportunidad de vivir pequeñas victorias que tendrán una influencia directa en su autoestima. Les permite también descubrir que el esfuerzo colectivo es más poderoso que el individualismo, pues les posibilita establecer fuertes vínculos con sus compañeros de equipo.
La intervención del entrenador con los niños tiene, pues, una influencia directa en su desarrollo. Este libro critica los viejos modelos de manipulación y descubre otra voz muy distinta para expresarse e influir positivamente en los niños y jóvenes.
Mediante una verdadera pedagogía deportiva se sugieren las condiciones para ayudarles a atravesar todas las etapas de un progreso deportivo y enseñarles a superar los obstáculos que surgen en su camino.