Al limpiar los frescos de la Capilla Sixtina, los restauradores descubren algunas partes señaladas con letras que no tienen ningún sentido. El cardenal Jellinek inicia una investigación que le llevará hasta el Libro de Jeremías, un documento olvidado que revela aspectos sobre la resurrección de Jesús que pueden hacer tambalear los cimientos del cristianismo.