Un agente de la CIA es relevado de sus servicios y destinado a oficina cuando el hombre que estaba bajo su vigilancia es asesinado. Empieza a investigar y descubre una trama siniestra. La estatua de una Virgen negra le proporciona la primera pista sobre una conspiración que pretende devolver el poder a una antigua dinastía.
«Una novela inteligente y trepidante que hurga en demasiados asuntos sucios...» Publishers Weekly