El libro recorre varios aspectos de las relaciones amorosas heterosexuales
que normalmente pasan desapercibidos. El libro cuestiona los tópicos más comunes que muestran cómo estas relaciones se convierten en un campo de batalla de los sexos. Lejos de confirmarse la existencia de diferencias irreconciliables entre las mujeres y los hombres, la utore concluye que la experiencia del amor acerca a las personas y establece entre ellas un parecido que sobrepasa las diferencias de género.