La acción transcurre en la ciudad de Nueva York en un tiempo posterior al 11-S. En la primera página vemos al capitán Hill Sterwart, desabrigada Especial Antivicio del Distrito Midtown Sur, encolerizado ante una llamada que recibe de un veterinario relacionada con el tráfico de drogas. Como en el resto de la novela, en muy poco espacio y a un ritmo vertiginoso, se ha informado al lector de que el capitán está metido en un negocio sucio de drogas alcohólico y sobre todo de que nos encontramos con una obra escrita en un registro duro, trepidante y, sobre todo, muy
divertido.